Amanecer feliz es una garantía para tener un buen día y una gran forma de asegurarlo es hacer el amor al despertar. De hecho, este acto no solo nos aumenta las posibilidades de arrancar la jornada de buen ánimo: el sexo matutino mejora el funcionamiento fisiológico de varias partes de nuestro cuerpo.
Hacer el amor al despertar influye en nuestra calidad de vida y deberíamos comprender las bondades que esta actividad conlleva, para practicarla siempre que sea posible. Además, deben hacerse la mayor cantidad de actividades que sean posibles realizar antes de comenzar con la rutina matutina, ya que estas nos predisponen a no tener sueño, sintiendo que estamos en actividad hace muchas horas.
Un estudio asegura que hacer el amor al despertar multiplica los anticuerpos que nos mantienen inmunes a ciertas enfermedades, o que ayudan a combatirlas. Esto refuerza el funcionamiento de nuestros órganos que no se dedican a solucionar problemas que tenemos, por lo que se relajan y optimizan sus funciones.
Hacer el amor al despertar también mejora la circulación, reduce la presión sanguínea y el riesgo de infarto. La irrigación aumenta, activada por la erección y nuestro funcionamiento sanguíneo comienza a ejecutarse desde bien temprano, lo que evita que tengamos que activarlo de repente, lo que puede causarnos, poco a poco, un antecedente que nos clasifique como propensos a infartar.
Investigaciones anteriores habían comprobado que el sexo clasifica como uno de los ejercicios físicos que más calorías consume en menos tiempo, con marcas de hasta 3.000 calorías, y con ello se reduce el riesgo de padecer ciertas dolencias crónicas como la diabetes. Además, practicarlo con la asiduidad que el placer provoca, nos lleva a perder peso sin proponérnoslo y aliviar dolencias como la artritis o la migraña, tan molestas como frecuentes entre las personas.
Un buen orgasmo aumenta los niveles de estrógeno, una hormona que si bien circula de manera anónima por nuestra sangre, se traduce el mundo exterior de varias formas. Tener el estrógeno en buenos niveles redunda en nuestro bienestar, pero puntualmente influyen en la multiplicación del brillo de nuestro cabello y la ternura de nuestra piel, además de prevenir las depresiones, cambiando las tendencias que tenemos por ver lo negativo de las cosas y estar predispuestos a considerar que lo malo que sucede a nuestro alrededor es únicamente nuestra responsabilidad.
Hacer el amor al despertar protege a la mujer de la endometriosis, mal que ocasiona el crecimiento patológico de tejido fuera del útero. Esta patología se aloja sobre todo en la cavidad pélvica y en los ovarios, detrás del útero, en los ligamentos uterinos, en la vejiga urinaria o en el intestino. También puede aparecer, aunque es menos frecuente, fuera del abdomen y en los pulmones, así como en otras partes del cuerpo.
Al hacer el amor al despertar, sumamos los beneficios que tiene esta actividad a los que nos proporciona cualquier deporte matutino, haciendo que su práctica sea muy recomendable. Además, siempre que una pareja tiene relaciones sexuales exitosas, ambas partes salen fortificadas en su amor y su autoestima, lo que se potencia cuando sucede al comienzo del día, ya que permite encarar las tareas con una actitud sumamente positiva ante los avatares del trabajo.
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